Un poco de historia...

En los últimos tiempos la cosmética natural esta ganando terreno y vuelve a recuperar su esencia. Desde el principio de la humanidad el ser humano le ha dado importancia al cuidado de el cuerpo y la belleza. 

Todos hemos leído o escuchado hablar de una gran pionera en la cosmética natural, CLEOPATRA, cuya rutina de belleza ha perdurado y se ha transmitido tras generaciones, siendo conocida sobre todo por sus baños con leche de burra, que era muy apreciada por los egipcios debido a sus propiedades hidratantes, antioxidantes y regenerantes. Cleopatra, además fabricaba y usaba elaboradas cremas faciales totalmente naturales, que estaban compuestas por ingredientes ecológicos como el aceite de moringa, distintos tipos de incienso y por una delicada base de cera de abeja.

Recordemos también que en la antigua Grecia el culto al cuerpo y a la belleza en general, era de vital importancia. Las mujeres teñían sus cabellos con una mezcla de vinagre, aceite de flores y manzanilla, añadiendo determinados pigmentos minerales que extraían directamente de algunas flores o incluso de tierras y arcillas. 

Estoy convencida que podríamos recorrer las distintas épocas y culturas y comprobar, que esta costumbre por el culto a la belleza y al cuidado, siempre estaba muy presente en la sociedad y sobre todo en las mujeres.

Sin ir mas lejos, incluso recordaremos que nuestras abuelas utilizaban remedios caseros y naturales para su cuidado. Como la cosmética no estaba tan avanzada, utilizaban ingredientes que tenían en casa para potenciar aspecto como por ejemplo el brillo de su cabello usando vinagre  o aceite de oliva para hidratar y regenerar la piel.

Estos remedios naturales siempre han estado ahí a nuestra disposición, las plantas y la naturaleza nos ofrecen las materia primas mas puras. 

Cada vez más, tratamos de estar mas cerca de la naturaleza tanto en la alimentación como en el cuidado de nuestra piel y cabello. 

Estamos tan acostumbrados a comer alimentos como frutas y verduras que están tratados con fertilizantes químicos que  cuando recordamos el sabor de lo natural sentimos una tremenda nostalgia. Las frutas y verduras ecológicas favorecen la biodiversidad y utilizan recursos naturales, contienen el 50% mas de vitaminas, minerales y otros micronutrientes, respetando el medio ambiente y evitando la contaminación del agua y de la tierra.

Cosmética natural y ecológica. Una apuesta de valor por el Medio Ambiente

La cosmética natural al igual que la cosmética ecológica, no genera desechos químicos que perjudiquen la naturaleza, por lo general está libre de químicos agresivos que perjudican nuestra piel y repleta de nutrientes ya que utilizan materias primas extraídas de las plantas y de la tierra como aceites esenciales, mantecas, aceite vegetales, arcillas, etc…

En ICON Tienda Online apostamos por lo natural y ecológico, es uno de los valores más importantes que nos caracterizan, y uno de nuestros objetivos en cada uno de los productos que te recomendamos, una exigencia que intentamos cumplir siempre. - El respeto al medio ambiente y nuestro compromiso contigo, cuidando de ti y los tuyos - . 

Por eso elegimos nuestra nuestra linea de cuidado corporal Biocenter, porque está formada por productos 100% naturales y ecológicos de altísima calidad, libre de tóxicos y con un impacto medio ambiental bajo o nulo, elaborados con materias primas de origen natural y procedentes de cultura ecológica, una linea  vegana que ni contiene ingredientes de origen animal ni está probada en animales, además libre de siliconas y derivados de petróleo y envasada en plástico HDPE reciclado 100% reciclable.  Como ves, nuestro compromiso es Firme contigo y con el medio ambiente.

... y ahora un poco de higiene íntima... Natural y ecológica, por supuesto

Está claro que no tengo que decirte que una buena higiene íntima es fundamental para mantener la zona vaginal en buen estado y el pH íntimo regulado, ya que ayudará a que todos los microorganismos que habitan en tu flora vaginal estén en equilibrio. De esta manera, podrás prevenir infecciones vaginales y posibles molestias como la sequedad o la irritación.

Seguro que algo que ya sabías es que cada etapa de nuestra vida como mujer tiene un impacto en nuestra vagina, y ese impacto se caracteriza porque:

1. Nuestro pH vaginal va cambiando
2. Nuestra Flora vaginal no es siempre la misma
3. Cambian nuestros niveles de glucógeno
4. Cambia la textura y el grosor del epitelio

Además, cada etapa de nuestra vida presenta unas condiciones y necesidades distintas en cuanto a nuestras partes íntimas.

INFANCIA

En esta etapa de la vida, la zona genital femenina viene determinadas por:

• No se producen suficientes estrógenos
• La piel de la vulva es más fina
• Ausencia de bello púbico
• El pH es neutro.
• No se han desarrollado los labios menores
• La distancia entre el ano y la vagina es pequeña

Pues bien, todos estos factores que te he descrito antes, favorecen el desarrollo de vulvovaginitis, que son las infecciones más comunes en la infancia. Se caracterizan por presentar enrojecimiento de la vulva y una sensación continua de picor o prurito. La sensación de malestar para la niñas es muy grande y si no se trata se puede extender hacia la zona perianal.

Es importantísimo educar a nuestras hijas, y hacerles ver que un buen hábito de higiene íntima es vital.

PUBERTAD Y EDAD ADULTA

En esta edad se comienza con la producción de estrógenos produciéndose cambios fisiológicos en la mujer. 

La zona genital se caracterizar por:

• La mucosa se vuelve más gruesa
• el pH se vuelve algo más ácido (entre 3,5 y 4,5)
• Comienza a desarrollarse la flora protectora, sobre todo Lactobacillus, cuya misión es proteger de infecciones la zona vaginal.

MENOPAUSIA

Todas sabemos qué es la temida menopausia y las modificaciones que en nuestro organismo, e incluso en la zona vaginal sufrimos, que son:

• Alcalinización de nuestro pH, entre 6 y 7,
• Se percibe una disminución del grosor del Epitelio
• Disminuye la cantidad de glucógeno que producen nuestras células vaginales
• Menor cantidad de bello púbico por el debelitamiento del folículo piloto
• Disminuyen las secreciones cervicales 

Además de estos cambios a veces se suma la incontinencia, que como sabes se debe al debilitamiento de la musculatura pelviana.

Todos estos cambios fisiológicos también favorecen la aparición de algunos problemas como:

• La sequedad,
• Falta de lubricación
• Aumento de la sensibilidad vulvar
• Se incrementa el riesgo de padecer infecciones fúngicas y bacterianas
• Aumentan las infecciones urinarias.

Te propongo la mejor solución que he encontrado para que protejas y mantengas limpia tu zona genital...Naturalmente 

Como ya has leído y sabes, nuestra zona genital es una de las más sensibles de nuestro cuerpo por estar sometida a muchos cambios durante todas las etapas de nuestra vida.

Al final solo hay una premisa, cuanto más natural y ecológico sea el Gel que utilices, y menos químicos dañinos contenga, MEJOR!!!!.

Y no vale cualquier Gel, a pesar de que pienses que en las grandes superficies y supermercados tienen lo más natural y lo mejor porque ves la publicidad y parece que son la solución, pero al final, dañan la mucosa, que está compuesta por tejido epitelial y se va degradando poco a poco produciendo sequedad y en ocasiones picor. Seguro que esto te suena, sobre todo cuando tenemos relaciones sexuales y no lubricamos lo suficiente. Pero no te preocupes, porque en nuestra tienda tenemos lo que como mujer necesitamos para mantener una correcta higiene vaginal.

#9ConsejosQueAgradecerás

1. Lava tu zona genital cada día

Lava la zona vaginal externa con agua y usando un gel para la zona íntima, además no olvides limpiar también adecuadamente la zona anal. Es importante aclarar bien los restos de jabón con agua abundante, ya que si quedan sobre la piel pueden irritarla. La limpieza de la zona genital tiene que ser diaria, pero de forma moderada, un exceso de higiene también puede alterar la protección natural de la vagina y favorecer la aparición de molestias.

Evita en uso de esponjas en la zona, es mejor que la higiene la hagas siempre con tus manos, asegurándote de que estén bien limpias.

2. Evita las duchas Vaginales

Es recomendable evitar las duchas vaginales en las que se irriga el interior de la vagina, salvo que te las haya recomendado el médico. Este tipo de práctica puede eliminar las bacterias beneficiosas del interior de la vagina, alterando su equilibrio natural y dando lugar a problemas como la vaginosis bacteriana o la candidiasis vaginal. La higiene íntima femenina consiste en limpiar los genitales externos, pero sin eliminar la flora propia de la vagina, que está compuesta por organismos beneficiosos para mantener su salud.

3. No olvides secarte bien

Sécate muy bien después de la ducha con una toalla suave, pásala con delicadeza y no frotes. Es recomendable que la toalla sea de uso personal y que no la compartas con nadie más.   El paso de secar bien los genitales es importante pues la humedad en la zona puede favorecer que se multipliquen organismos como los hongos, que pueden causar infecciones como la candidiásis.

4. Límpiate correctamente tras ir al aseo

Siempre que vayas al baño límpiate de delante hacia atrás, así evitas trasladar gérmenes que pueden causar infecciones desde la zona anal hasta la vaginal. Teniendo este dato en cuenta, es también conveniente no abusar del uso de tangas. Lávate las manos antes y después de utilizar el inodoro y si en vez de papel higiénico prefieres limpiar tu vagina con toallitas, que sean específicas para esta zona.

5. La mejor ropa interior: Algodón

Las prendas íntimas más adecuadas son las de algodón, ya que permiten la transpiración, con lo que se reduce la humedad en la zona genital. La humedad y el calor propician el crecimiento de los hongos, por este mismo motivo, procura que la ropa en contacto con la zona no sea muy ajustada. Cámbiate la ropa interior todos los días y siempre que la notes humedecida, por ejemplo, después de practicar deporte con intensidad. Lava estas prendas con jabones suaves y fíjate en que se hayan aclarado bien y que no queden residuos de jabón en ellas.Cámbiate la ropa interior todos los días y siempre que la notes humedecida, por ejemplo, después de practicar deporte con intensidad. Lava estas prendas con jabones suaves y fíjate en que se hayan aclarado bien y que no queden residuos de jabón en ellas.

6. Practica sexo seguro. Esto ya lo sabes ;)

Lava tu zona íntima antes y después de mantener relaciones sexuales para disminuir el riesgo de contraer infecciones como la vaginosis bacteriana. Recuerda utilizar condones siempre que practiques sexo, especialmente si el mismo es casual, pues además de protegerte frente a un embarazo no deseado, previenen infecciones y enfermedades de transmisión sexual.

7. Higiene máxima durante la regla

Durante la regla, cambia con frecuencia las compresas o tampones y no los dejes puestos más de 4-6 horas seguidas. Es importante, además, no dormir con tampones, pues este hábito puede favorecer la aparición de infecciones íntimas. Si prefieres la copa menstrual, también tienes que vaciarla con frecuencia.

8. Haz dieta sana y evita automedicarte

El consumo habitual de probióticos, como los que encuentras en los yogures naturales o los encurtidos, ayuda a mantener una flora vaginal sana. Por otra parte, no tomes nunca medicamentos si no te los ha recetado un médico, de este modo evitarás abusar de medicamentos que podrían alterar tu pH vaginal, como es el caso de los antibióticos.

9. Ante cualquier molestia, ve al Ginecólogo

Si mantienes una higiene íntima adecuada pero sientes picor, quemazón, la zona está enrojecida o inflamada, te duele al orinar o cuando tienes relaciones sexuales o el flujo tiene un olor o color diferente al habitual, acude al ginecólogo. Estas molestias pueden deberse a una infección y es necesario consultar al médico